Muñecas que son mucho más
Esta vez, la artista Wendy Tsao ha borrado el maquillaje de estas muñecas para transformarlas en heroínas reales, dándonos ganas de volver a ser niños para jugar a ser ellas.
La maldición de la seda del mar
Como un cuento mágico o una leyenda escrita por seres extraordinarios, hace un par de meses llegó a nosotros la historia de la seda del mar.
Agroglamour
El año que viene nos vamos al Festival de Cans. No al glamour de la Costa Azul francesa sino al agroglamour de la aldea gallega de 400 habitantes que, desde 1994, celebra su propia fiesta del cine. Continuar leyendo…
El armario de Frida
Cuanto más dura se volvía la enfermedad de Frida, más elaborada era su ropa, yendo más allá de la moda para expresar la fuerza, identidad y belleza que desprenden sus obras. En su armario podemos encontrar sus orígenes mexicanos, españoles y húngaros pero también un reconocimiento y complicidad con las tradiciones indígenas y el matriarcado. Continuar leyendo…
Una cosa, una bolsa de basura, a la vez
Cada día, de camino al trabajo, Tommy Kleyn se enfadaba y entristecía al pasar por una zona al lado del río que estaba llena de basura.
Hasta que un día se levantó media hora antes, cogió una bolsa de basura y la llenó. Y al día siguiente otra, y al siguiente otra, y la diferencia se fue notando cada vez más. Continuar leyendo…
Fashion Revolution Day Barcelona
Aunque ya hace muchos meses que le damos vueltas a nuestro proyecto The GOOOD Shop, hemos querido nacer en el fin de semana más simbólico para la moda sostenible. Así, en pañales y con tarjetas de puño y letra, nos dispusimos a encontrarnos, esta vez en persona, con los protagonistas del Fashion Revolution Day Barcelona y del Sustainable Sunday de Barcelona. Continuar leyendo…
This is the goood shop
The Goood Shop es un proyecto pequeño (no se puede ser más pequeño que cuando acabas de nacer) dedicado a todas las marcas y consumidores que habéis decidido manteneros pequeños a pesar de haber crecido. A elegir con el corazón, sin hacer caso de la lógica aplastante de la estadística y las verdades macroeconómicas. A ser coherentes con el sentido de justicia sin excepciones, ese que tendemos a perder cuando dejamos de ser niños. Continuar leyendo…