No hay peor cosecha, ni más desagradecida, que la que nos devuelve día a día el mar. Plásticos de todos los tipos y tamaños, colillas y demás porquerías de las que nos olvidamos en cuanto las perdemos de vista, como si desaparecieran por arte de magia.
Si vemos la playa sucia, pensamos que alguien debería limpiarla. O la manchamos un poco más porque, total, si no lo hacemos nosotros, lo va a hacer otro.
Por suerte están los recolectores. Este post es un homenaje a todas esas personas que no solo no ensucian, sino que limpian a su paso, y también una invitación a que te conviertas en uno de ellos :)
Hay muchos tipos de recolectores. Unos van solos, otros acompañados. Han decidido no perder un minuto en protestar sin hacer nada y han pasado a la acción, sin importarles que los tachen de pequeños gestos individuales inútiles, o tontos que hacen el trabajo de otro.
Tampoco son buenos estadistas y jamás se han parado a pensar en el hecho de que son más los que tiran que los que limpian.
Al día siguiente, puede que la playa esté igual o peor pero, a su paso, todo se queda más bonito.
Quien ha visto trabajar a un recolector, jamás lo olvida. Se le queda grabado en el fondo de su corazón, o de su conciencia, y, para su regocijo o pesar, es muy probable que se acabe convirtiendo en uno de ellos. Eso significa que, poco a poco, silenciosamente, se están multiplicando.
Tú también puedes ser un recolector o recolectora. Solo tienes que cambiar la amargura, impotencia e inmovilidad de la queja por la liberación y el optimismo de la acción. ¡Te convertirás en un héroe!
Eso sí, para finalizar esta cosecha maldita, lo más recomendable es dejar de sembrar tantas semillas envenenadas. Evita los envases siempre que puedas, reutiliza, haz un uso responsable de lo que compras, recicla. Aquí te dejo cuatro posts inspiradores escritos por recolectores, que explican sus motivos e ideas para pasar a la acción y luchar por el planeta:
- 11 tips para unas vacaciones sostenibles, de Ecoblog Nonoa
- 10 cosas que debes hacer por los océanos, de Esturirafi
- 11 tips de ecobloggers para un turismo sostenible, de La Ecocosmopolita
- Dos años viviendo sinplástico, de Vivir sin Plástico
Y también vuelvo a recomendarte que te pases por el instagram de Hola Eco, durante estas semanas todos los bloggers hemos ido publicando nuestros trucos y consejos para vivir sin plástico en distintas situaciones.
Aprovecho para desearte un buen agosto porque este blog se va de vacaciones, por lo menos, hasta septiembre. Podrás encontrarme en facebook, en instagram, en twitter y en The Goood Shop, ya que estas semanas seguiré recorriendo talleres y conociendo creadores responsables, así que habrá novedades en la tienda :)
Hola Carmela!
Me ha gustado mucho el artículo, tanto por lo que cuentas como por la manera de contarlo.
Espero realmente que esta actitud de recolectores se contagie y cada vez seamos más los que nos agachamos a recoger lo que algún desalmado ha dejado tirado a su paso.
Con tu permiso, comparto el artículo en mis redes.
Un abrazo,
Lorena
Hola Lorena!
Muchísimas gracias por tu comentario y por compartirlo en tus redes! :)
Después de unos días de mucha desconexión, recién empiezo a volver a las mías…
Un abrazo,
Carmela
Muy inspirador! Gracias!
¡Toda la razón Carmela! Una ves leí algo muy inspirador que con el paso de los años toma cada vez más sentido. Decía… ‘Los verdaderos héroes no son los que se ven, son los que están ocultos humildemente entre la muchedumbre’. Hablaba de las personas que cambiaban el mundo y estoy segura que así es, que el cambio está en cada uno de nosotros a través de nuestras pequeñas grandes acciones.
¡Muchas gacias por incluirnos! ¡Y felices vacaciones!
:) Es verdad! Y creo que el hecho de volverlos menos anónimos puede provocar un efecto dominó imparable :)
Felices vacaciones para ti también!