Más allá de la belleza, Mónica Rohan, la artista que oculta su cara, muestra una sensibilidad y calidez única en cada uno de sus no retratos.
Demostrando que puede ser dos, una o ninguna y mucho más al mismo tiempo.
Abrigándose, abrigándonos, con un abrazo que roza lo sobrenatural y que sin embargo es extrañamente humano y a la vez artístico.
Hace frío y, aunque no lo hiciera, quiero envolverme entre los 1.001 estampados de Mónica Rohan.
Las fotos y el descubrimiento los he hecho a través de ItFashion