Un fotógrafo jamás pierde su cámara. Sin embargo, cuando se trata de la tapa de su objetivo, el cuento es muy distinto. Las casas fotográficas lo saben muy bien y no se cortan en poner a ese trozo de plástico un precio de dos cifras.
Encima, cada día tiramos muchos trozos de plástico provenientes de lo que comemos… ¿Nos seguís?
Resulta que se ha descubierto que el tamaño de la tapa de un helado Häagen Dazs es igual al tamaño de la tapa de prácticamente cualquiera de los objetivos de nuestras cámaras reflex.
Nos encanta salvar un objeto de la basura con tan rotunda utilidad. ¿Se os ocurren otras ideas para salvar otros objetos?
Vía Bored Panda